La ferritina corresponde a una proteína presente en la sangre, que se encarga de almacenar el hierro para que el cuerpo pueda utilizarlo cuando sea necesario, y mantener sus niveles bajo control es importantísimo para evitar comprometer nuestra salud, ya que una cantidad de ferritina alta puede ocasionar graves consecuencias como las que aquí te contamos.
¿Cuáles son los valores normales de ferritina en la sangre?
Los niveles de ferritina en la sangre suelen variar según la edad y el sexo del paciente.
- En hombres: entre 12 y 300 nanogramos por mililitros de sangre.
- En mujeres: entre 12 y 200 nanogramos por mililitro de sangre.
- En recién nacidos: entre 400 y 600 nanogramos por mililitro de sangre.
Una cantidad de ferritina más alta de lo normal puede ser el resultado de un trastorno de tipo inflamatorio, enfermedades hepáticas o transfusiones constantes de concentrado de glóbulos rojos, entre otras causas.
¿Qué consecuencias se derivan de los niveles de ferritina altos?
Entre otras cosas, la ferritina alta suele producir deposición de hierro en el cuerpo, sobre todo en las articulaciones, generando un intenso dolor en el cuerpo del paciente e incrementando el riesgo de daños en los órganos. Asimismo, un nivel elevado de esta proteína en la sangre puede conllevar a un oscurecimiento de la piel, fatiga, dolor abdominal y algunos problemas del corazón.
Como hemos dicho, la acumulación excesiva y gradual de hierro en el organismo puede ocasionar daños en distintos órganos de nuestro cuerpo, dando lugar a la aparición de un gran número de enfermedades como cirrosis hepática, artritis, osteoporosis, problemas de fertilidad y problemas cardíacos.
En fin, son muchas las consecuencias que pueden asociarse a una cantidad de ferritina alta en la sangre, por lo que se recomienda acudir a un especialista médico que, luego de evaluar un examen de ferritina, pueda detectar las causas de su aumento y recetar el tratamiento indicado para restituir la salud del paciente.